Publicaciones

abuso sexual2

 

 

 

 

A los padres, familia, escuela e instituciones que trabajan con niños/as, les cuesta trabajo afrontar apropiadamente y en forma eficaz la Prevención en el Abuso Sexual Infantil.  Por lo general las intervenciones se limitan a las instrucciones defensivas que no desarrollan capacidades y destrezas efectivas, no habilitando así a los niños/as a protegerse del abuso sexual.  A modo de ejemplo se utilizan frases como: “tienes que defenderte, si alguien te toca ahí”, “nadie debe tocar tu cuerpo”, “no hables con extraños”, esta última frase alejada completamente de la realidad, ya que como se dijo anteriormente más del 84% de las agresiones sexuales las realizan personas que mantienen un vínculo afectivo con la víctima.

La prevención del abuso sexual infantil, habitualmente es un tema que no se aborda en las familias ni las escuelas, haciendo un silencio casi cómplice a esta realidad. El prevenir no necesariamente implica promover la desconfianza desatada. Por lo general se les dice a los niños/as “cuídate” sin enseñarles cómo hacerlo y sin entregarles habilidades y destrezas conductuales que los hagan competentes para ello. Estas habilidades se pueden adquirir por medio de procesos de aprendizaje estructurado y continuo, que dependerá del desarrollo evolutivo del niño/a. Por la vía del ejemplo, un niño/a preescolar se puede motivar a través del juego, que es una excelente forma de reforzar conductas de prevención. Utilizando el mismo juego, los padres pueden traer sus propias preocupaciones y animar a sus hijos tome conciencia de los peligros a los que se pueden ver expuestos y que, existen dentro y fuera del sistema familiar.